La Sagrada Familia se convierte en la iglesia más alta del mundo tras avanzar en la torre de Jesucristo.

La basílica de la Sagrada Familia ha alcanzado un nuevo hito en su construcción. Este jueves se ha instalado la primera pieza de la cruz que coronará la torre central dedicada a Jesucristo, diseñada por Antoni Gaudí. Con este nuevo elemento, el emblemático templo de Barcelona ha llegado a los 162,9 metros de altura, convirtiéndose así en la iglesia más alta del mundo, superando al Ulmer Münster de Alemania.

Los responsables del proyecto han confirmado que la torre se completará en los próximos meses y que la inauguración oficial está prevista para junio, coincidiendo con el centenario de la muerte de Gaudí. Para esta ocasión, la basílica ha solicitado al Vaticano la presencia del papa en la misa conmemorativa.

La pieza instalada corresponde al brazo inferior de la cruz, mide 7,25 metros de alto y pesa más de 24 toneladas. Llegó a Barcelona el pasado mes de julio dividida en cuatro paneles, que fueron ensamblados sobre una plataforma situada a 54 metros de altura en el interior del templo. Durante esta fase, también se completaron los trabajos de colocación de los vidrios y el revestimiento de piedra, que formarán parte del acabado final de la torre.